Plan renove italiano: las ventanas nuevas y el moho
La sustitución de las ventanas con la entrada en vigor del bonus 110% se está convirtiendo en un verdadero negocio y, junto a un buen aislamiento del envolvente, una gran ventaja en términos de confort energético.
Por lo tanto, se ha creado a todos los efectos una casa hermética, esto quiere decir que eliminamos completamente las famosas corrientes.
Lo que no nos dicen todos, en cambio, es que, creando un cerramiento hermético, ya no se efectúa más el recambio de aire. Ciertamente, en combinación con la sustitución de las ventanas, se debería instalar un sistema de recambio de aire forzado. Pero esto último no siempre es posible realizarlo, sea por problemas de logística y/o coste.
Uno de los principales problemas que puedes encontrar en casa después de haber sustituido las ventanas, es la condensación y el moho.
Ahora ya es sistemático: donde se cambian las ventanas y no se crea un recambio de aire adecuado (en función de los metros cuadrados y del número de personas que habitan en casa), pasado un cierto tiempo, aparece el moho en las paredes, causado por la condensación que se crea.
La condensación se produce por la humedad que se va creando día tras día, llegando a un nivel tan elevado (sobre todo en el periodo invernal), que satura el aire para después depositarse en las paredes desencadenando, en consecuencia, la proliferación de esporas fúngicas (moho).
¿Qué situaciones producen humedad?
Desde respirar hasta cocinar, dormir, darse un baño o poner el lavavajillas.
Estas son las más comunes. Cada una de estas actividades produce entre 500 y 1500 gramos de humedad.
¿Qué es la humedad?
La humedad es la cantidad de agua o vapor de agua contenida en el aire. Una familia media de 3-4 personas genera de 10 a 15 kg de humedad al día en el interior de una vivienda.
El aire es el contenedor de la humedad, y es un contenedor relativo, prácticamente cuanto más alta sea la temperatura del aire, más grande será el contenedor y estará en condiciones de contener más kg de agua, de ahí el término humedad relativa.
Este contenedor tiene un límite más allá del cual no está en condiciones de mantener la humedad, hasta llegar a un punto de saturación. Superado este, si en el ambiente no hay una renovación de aire, el exceso se condensa sobre las superficies, paredes incluidas, donde el estancamiento de esta, provoca el moho.
Los peligros del moho
El moho se forma sobre los muros y paredes de casa y es peligroso, tóxico y cancerígeno.
Este problema, que a veces está infravalorado, dándosele más importancia al daño estético, puede ser la causa de trastornos varios, desde alergias y asma hasta dermatitis de la piel, fiebre y tos, dolores articulares que nos llevan a padecer un continuo dolor de cabeza.
El moho es peligroso, sobre todo si se localiza en lugares donde la familia vive cotidianamente, porque puede provocar, especialmente en los niños, cambios de humor, escasa concentración y efectos en el comportamiento.
Todo ello porque el moho, además de afectar a las vías respiratorias, es capaz de producir cambios físicos y psicológicos en las personas adultas y niños.
El moho es tóxico, porque a través de sus esporas libera toxinas peligrosas para la salud, a causa de las sustancias químicas en ellas contenidas, como las cetonas y alcoholes, que son el origen del típico olor a moho.
Determinadas tipologías de moho pueden ser muy tóxicas para las personas. Su toxicidad y efectos están siendo estudiados científicamente bajo el nombre de MVOC (Compuestos Orgánicos Volátiles Microbiológicos).
El moho, tóxico para la salud
Estos estudios han evidenciado que la toxicidad del moho puede afectar a diversos órganos vitales del aparato gastrointestinal, respiratorio e incluso al sistema nervioso central, cefaleas y enfermedades que afectan a la piel, los ojos o las mucosas.
Todo ello se magnifica en personas con bajas defensas inmunitarias, esto es, niños, enfermos de SIDA, pacientes con trasplantes etc., en los cuales se constata una particular sensibilidad al afta, candidiasis intestinal y al tracto genital.
Por ejemplo, aspergillus niger que crece sobre paredes húmedas, provoca infecciones llamadas aspergilosis. Estas infecciones afectan generalmente al aparato respiratorio (nasal y pulmonar) desde los cuales, en casos particulares, se pueden extender a otros órganos.
Existen también infecciones que afectan a la piel y el oído externo. El aspergillus fumigatus y el aspergillus clavatus pueden provocar alergias.
Algunas especies producen sustancias extremadamente tóxicas como la aflatoxina, que, además de la toxicidad directa, son también cancerígenas.
Otro ejemplo de moho es el chaetomium globosum que se encuentra comúnmente en edificios húmedos de todo el norte de América y Europa. Esto es causa de problemas de salud debido a la naturaleza alergénica de estos hongos.
La C. globosum y sus esporas contienen antígenos como Chg45, que induce a la producción de anticuerpos IgE y IgG en personas alérgicas. Esto puede conducir a asma no atópico, sinusitis y enfermedades respiratorias en los habitantes de edificios contaminados.
¿Es verdad que el moho es cancerígeno?
«Partimos directamente del supuesto de que el moho es un hongo constituido de microorganismos vivientes bajo la forma de bacterias y esporas, con lo cual, como en la naturaleza, existen hongos comestibles y hongos venenosos, también los hongos del moho pueden ser inocuos o muy peligrosos para la salud del humano hasta ser cancerígeno.»
«Entre los muchos tipos de moho, la más peligrosa es la originada por el hongo Strachybotrys Chartarum que se aparece con manchas negro verdosas sobre las paredes y los techos de las casas a causa de la humedad acumulada y/o de las infiltraciones de agua y las micotoxinas que son altamente cancerígenas.»
Alessandra Losito
Eliminar el moho con lejía
A menudo te aconsejan usar productos pulverizados o no, a base de hipoclorito de sodio (lejía).
Es recomendable evitarlos ya que no sirven de nada. Son simplemente blanqueantes que eliminan momentáneamente el negro del moho, que en breve volverá a salir de nuevo, siendo ineficiente sobre el soporte, donde el moho volverá a formarse rápidamente, por otro lado, la lejía es altamente tóxica.
¿Cómo puedo eliminar el moho?
Resuelve tu problema utilizando la única intervención antimoho 100% natural, biocompatible, certificada y garantizada.
Durga Srl es una empresa italiana situada en Fauglia, en la provincia de Pisa, y desde 1994 produce pinturas y otros elementos de acabados para el sector de la construcción, 100% naturales, exentes de derivados del petróleo, atóxicos y no nocivos, utilizando materias primas de origen vegetal y mineral.
Durante estos años de actividad, el laboratorio de Durga ha desarrollado un pack antimoho garantizado y Certificado C.S.I. (ver certificaciones adjuntas) completamente natural.